Vale la pena repetirlo: no puede dañar a una persona con naloxona. Si una persona no consumió opioides, la naloxona no tendrá ningún efecto en su organismo. También se puede administrar a menores o incluso a mascotas, si es necesario.
Si aún tiene inquietudes, debe saber que durante años el personal de emergencias médicas y de primeros auxilios, como la policía y los bomberos, han utilizado naloxona. La Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó por primera vez la naloxona en la década de 1970 y los formularios para consumidores se aprobaron en 2014 (Evzio) y 2015 (Narcan).
Además, la naloxona que puede adquirir en una farmacia fue diseñada para ser administrada con facilidad.